Mar del Plata ajusta precios y servicios de balnearios para atraer turistas en el verano 2026
Tras un inicio con valores elevados en alquileres, algunos balnearios comenzaron a flexibilizar tarifas y financiación. Mientras tanto, el Balneario 12 de Punta Mogotes lidera en reservas, con más del 65 % de ocupación confirmada.
La ciudad de Mar del Plata se prepara para recibir a miles de visitantes en la temporada de verano 2025/2026 y, en medio de la expectativa, los precios de alojamientos y balnearios comenzaron a acomodarse. Tras un arranque con valores muy elevados, varias casas y departamentos bajaron sus tarifas, mientras que los hoteles ofrecen promociones semanales.
En este contexto, la clave para los turistas parece ser la relación entre precio y servicio. Según confirmaron a minutouno.com, el Balneario 12 de Punta Mogotes ya logró asegurarse más del 65 % de reservas pagadas, gracias a una propuesta que combina financiación en cuotas sin interés, carpas a $80.000 por día y servicios que apuntan a toda la familia: piletas climatizadas, hidromasajes, juegos para chicos, mercado con precios similares a los de la ciudad y restaurante con valores accesibles.
"Todos preguntan por financiación. La idea es que la gente llegue y pueda disfrutar sin que las vacaciones se conviertan en un dolor de cabeza", explicó Augusto Digiovanni, dueño del tradicional parador.
Las tarifas varían según el tiempo de permanencia: una semana cuesta $560.000, diez días $800.000, la primera quincena de enero $1.100.000, la segunda $1.200.000, y la temporada completa $3.600.000, más $15.000 de estacionamiento por día.
Sin embargo, no todos los balnearios mantienen políticas de precios accesibles. Un complejo del sur marplatense lanzó un paquete premium que incluye garumun, tres cocheras y sombrilla por $6.300.000 de contado, con servicios exclusivos como piscinas, solárium vidriado, spa, gastronomía gourmet y Kids Club.
Con estas propuestas, Mar del Plata busca consolidarse nuevamente como el destino más elegido del país, en una temporada en la que los turistas parecen estar decididos a elegir con lupa dónde gastar su dinero.