Nueva presidenta y cero avances en la pelea salarial del Garrahan
La audiencia de conciliación por el reclamo salarial en el Hospital Garrahan volvió sin nada concreto. Se va Soraya El Kik y asume Mariel Sánchez en la presidencia del Consejo. Los trabajadores no aflojan.

El conflicto en el Hospital Garrahan sigue viento en popa y sin freno. Este martes, la esperada audiencia de Conciliación Obligatoria convocada en la Secretaría de Trabajo terminó siendo un papelón: los representantes sindicales de ATE se quejaron a viva voz porque no apareció ni el Tato, ni las autoridades del Garrahan ni del gobierno nacional para poner sobre la mesa una solución al reclamo salarial que viene desde hace meses.
Alejandro Lipcovich, delegado de ATE, no se guardó nada y describió la situación con un tremendo "le tiraron nafta al fuego" para graficar la bronca que les quedó después del encuentro fallido. Para colmo, el mismo día que no hubo diálogo, se confirmó la renuncia de Soraya El Kik a la presidencia del Consejo de Administración del hospital, según el comunicado oficial, por razones de salud, aunque todo pinta a que esta movida junta con la crisis del reclamo.
Los dirigentes no dudan en apuntar contra el Gobierno y las autoridades sanitarias: "¿Cómo pueden sostener que un hospital pediátrico de primera línea siga con enfermeras que cobran menos que la línea de la pobreza?", explotó Lipcovich, señalando la falta de compromiso y propuestas serias para destrabar este lío que ya lleva meses. Por su parte, Gerardo Oroz afirmó que la negativa oficial a presentarse en la negociación es una burla para toda la gente que trabaja en el hospital.
Mientras tanto, el plan de lucha sigue firme: este martes hubo movilización desde el Obelisco a Plaza Mayo y se viene una nueva asamblea para ajustar los próximos pasos. "Las medidas de fuerza van a seguir, sólo falta saber cómo", aclaró el delegado.
En medio del bardo, tomó el mando como nueva presidenta del Consejo la Dra. Mariel Sánchez, una médica pediatra con una larga historia en el Garrahan desde 1993 y con amplia experiencia en bioética y administración hospitalaria. Según el comunicado oficial, ella continuará con una gestión enfocada en la eficiencia, transparencia y uso responsable de los recursos para garantizar una atención de calidad sin privilegios.
El Garrahan, epicentro de esta pulseada, se mantiene en el ojo del huracán por estos días, y los trabajadores siguen con la mecha corta exigiendo respuestas que, hasta ahora, brillan por su ausencia.