¡LA IGLESIA LE DIO CON TODO A MILEI POR EL AJUSTE EN EL GARRAHAN!
La Conferencia Episcopal Argentina bancó a los médicos del Hospital Garrahan y le pegó duro al ajuste de Javier Milei en Salud. La carta, firmada por altos obispos, cuestiona la falta de valoración a los profesionales y la crisis en pediatría.

La Conferencia Episcopal Argentina, con la firma del arzobispo Marcelo Daniel Colombo y el obispo Raúl Pizarro, no se guardó nada y salió a bancar a los médicos del Hospital Garrahan en medio del ajuste que propone el gobierno de Javier Milei. En una carta que llegó el jueves al hospital pediátrico, los obispos se preguntaron: "¿Qué tipo de sociedad y de gobierno son capaces de no valorar adecuadamente la misión de los médicos?".
El texto resalta la dura realidad que enfrentan los trabajadores del Garrahan, que lidian todos los días con la pobreza, la niñez y el sufrimiento, y los califican como "particularmente valiosos para quienes nos llamamos cristianos". Además, dejaron clarito su apoyo al reclamo salarial y a la crítica situación de la pediatría en el país, definiendo el conflicto como "dramático".
Mientras los médicos residentes levantaron el plan de lucha por las amenazas del gobierno, la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE) convocó a una Jornada Nacional de Lucha en todos los hospitales públicos para rechazar los bajos sueldos, la fuga de profesionales y la falta de respuestas oficiales.
La Iglesia, con un tono pastoral pero sin perder la garra, lanzó preguntas picantes: "¿Qué nos ha pasado como sociedad que nos hemos vuelto insensibles al dolor de los más vulnerables: los niños y las personas con discapacidad? ¿Cómo podemos decir que valoramos toda vida y queremos defenderla cuando está amenazada si no priorizamos a quienes cuidan de la vida en todas sus formas?".
Los números no mienten: más de 200 profesionales renunciaron al Garrahan en lo que va del año. El salario promedio ronda el 1,5 millones de pesos, con guardias pediátricas que pagan unos 6 mil pesos por hora, mientras que en el sector privado llegan hasta 27 mil pesos la hora. Un golazo para los privados y un papelón para el Estado.
La Iglesia no se quedó en la crítica y se comprometió a amplificar el reclamo: "Nos ponemos a disposición para extender a través de nuestra voz un pedido tan justo como impostergable". No es la primera vez que los obispos le tiran un centro al gobierno de Milei; en el último tedeum, el arzobispo de Buenos Aires, Jorge García Cuerva, ya había alertado que en Argentina "se está muriendo la fraternidad, la tolerancia y el respeto".
En medio de esta movida, la pregunta queda picando: ¿Hasta cuándo vamos a seguir dejando que se caigan los pilares de la salud pública sin que nadie se ponga la camiseta?