¡Se desmayó en TV! La mujer que acusa a la mamá de Ayelén Paleo de explotar mujeres: "Me sacaba el 70%"
Un momento de pura tensión se vivió en la tele: Luisana Cardozo se descompensó en vivo mientras denunciaba a Elizabeth Rodrigo, madre de la vedette Ayelén Paleo, por liderar una red de explotación sexual y económica de mujeres.
Un momento de pura tensión se vivió en "Los profesionales de siempre" (El Nueve) cuando Luisana Cardozo, la joven que denunció a Elizabeth Rodrigo, la mamá de Ayelén Paleo, se descompensó en vivo. La mujer estaba contando su dura historia de cómo, según ella, fue estafada por la madre de la vedette, quien está detenida por una causa grave que investiga la explotación de mujeres.
Cardozo relató ante la cámara que en 2017 buscó a Rodrigo para hacerse unos books de fotos. Al poco tiempo, la madre de Paleo le habría ofrecido "clientes, empresarios, políticos" y "muy buen dinero". Pero la cosa se puso fea: "Pasó el tiempo y ya me quitaba el 70% de lo que yo ganaba y me mandaba clientes espantosos. Y la que me traía los clientes era Ayelén", aseguró la denunciante, sin guardarse nada.
En medio de su crudo testimonio, Luisana empezó a sentirse mal. Pidió azúcar, pero la situación empeoró y se desvaneció en el estudio, obligando a ir a un corte de urgencia. Los conductores y el equipo de producción se preocuparon muchísimo. "La verdad que se puso muy mal, nos preocupó. Lamentablemente la superó la situación", explicó Estefanía Berardi, visiblemente afectada.
Ya recuperada, Luisana contó que le había bajado la presión, seguramente por la carga emocional de revivir esos momentos tan difíciles, sumado a que no había desayunado. "Fue muy fuerte tocar estos temas, hay un abogado que quiere defender al lado culpable. Él no sabe lo que pasamos nosotras con esta mujer", agregó, agradeciendo la atención recibida.
El caso que sacude al mundo del espectáculo y la crónica policial es grave. Elizabeth Rodrigo lleva una semana detenida, acusada de ser parte de una red que captaba y explotaba sexualmente a mujeres. La modalidad era terrible: les ofrecían falsos trabajos de empleadas domésticas y después las obligaban a prostituirse en varias provincias como Buenos Aires, La Pampa y Santa Fe.
Rodrigo se defendió diciendo que solo hacía fotos y que lo que pasaba después no era asunto suyo. "Yo soy fotógrafa profesional y cobraba por las fotos. Lo que hacían con mi trabajo no era mi problema", declaró. Pero la fiscal Cecilia Corfield sostiene que ella era clave para promocionar los "servicios" en internet, lo que generaba ganancias para la organización.