Milei baja retenciones a seis productos y prende la mecha en La Rural
En la 137° Exposición Rural, Javier Milei anunció reducciones en los derechos de exportación para carne, maíz, soja y más. Aseguró que la baja será permanente mientras esté en el Gobierno.
El Presidente Javier Milei se llevó todos los aplausos este sábado en la 137° Exposición Rural, que se armó en el barrio porteño de Palermo. Allí, en su discurso, tiró la bomba: una "baja permanente" en las retenciones a la exportación de seis productos agrícolas clave, y prometió que se mantiene mientras él siga en el poder.
Con voz firme, Milei calificó a las retenciones como "nefastas y siniestras", y apuntó directo contra la política tradicional, a la que acusó de exprimir al sector más pujante del país. "No podemos dar por finalizada la guerra contra el modelo empobrecedor", lanzó, y no se guardó nada al pedirle a los productores que no dejen volver a la casta en las próximas elecciones legislativas.
¿Y cómo quedan las retenciones tras este anuncio? La carne bovina y aviar bajan del 6,75% al 5%, el maíz y sorgo del 12% al 9,5%, el girasol del 7,5% a 5% (y otros tramos de 5,5% y 4%), la soja del 33% al 26%, y los subproductos de soja del 31% al 24,5%. Una movida que promete mover el tablero agropecuario.
En cuanto al entorno de Milei, en la primera fila de la Rural lo acompañaron figuras como Nicolás Pino (titular de la Sociedad Rural Argentina), y su círculo más íntimo: el ministro de Economía Luis Caputo, el ministro de Defensa Luis Petri, el jefe de Gabinete Guillermo Francos, y su hermana y secretaria General Karina Milei, apodada "el Jefe". También estuvo cerca José Luis Espert, mientras que el jefe de Gobierno porteño Jorge Macri quedó un poco más alejado.
Notorio fue el ausente: Victoria Villarruel no pudo entrar al predio, dejando en claro la ruptura con Milei. Tampoco estuvieron los jefes de las Fuerzas Armadas, invitados por la Sociedad Rural pero bajados por orden presidencial.
Con esta movida, Milei busca agarrar la delantera y poner a la agroindustria en su esquina. ¿Será suficiente para que la casta se quede sin la torta? El tiempo y las urnas lo dirán.
