¿Te salvás? Autos 0km con patente provisoria: el curro que zafa de las fotomultas (por ahora)
Si sacaste un 0km y andás con la patente de papel, ojo, que acá te contamos por qué zafás de las fotomultas... ¡pero no te confíes! La data posta para que no te garquen.

¡Che, gente del Sur! ¿Sacaste un 0km y andás joya con la patente de papel, pensando que sos Gardel? ¡Pará la moto! Que acá en Del Sur Diario te contamos la posta sobre por qué, por ahora, te salvás de las fotomultas... pero no te confíes que la cosa puede cambiar.
Resulta que hay una banda de autos y motos 0km dando vueltas por el país con las patentes provisorias de papel que te da el DNRPA. Y aunque los radares estén sacando fotos a lo loco, ¡muchos de estos vehículos no reciben las multas! ¿Por qué?
No es que el radar no pueda leer la patente de papel, ¡ojo! El tema es que esos autos no están registrados en el sistema como corresponde. Según cuentan en las concesionarias: "Nosotros mandamos a los Registros con los que trabajamos el pedido de alta de un vehículo y ellos nos mandan el título digital y las matrículas de papel con los datos del auto. Esas placas las pegamos en los vidrios y entregamos el vehículo en esa condición".
¿Qué pasa? Cuando te dan la patente de papel, los datos quedan guardados en el Registro Automotor donde hiciste el trámite. ¡No se cargan al sistema nacional! Entonces, aunque te saquen una foto por exceso de velocidad, es un quilombo rastrear al titular del auto para mandarle la multa. Imaginate, ¡tendrían que buscar en cada registro del país!
Un capo de un organismo de control municipal de Buenos Aires lo confirmó: "Esas multas no se hacen, es casi imposible rastrear el auto aún si se pudiera leer correctamente la patente de papel porque en el sistema nacional está cargado cada auto con su dominio, que no es esa placa provisoria sino el número de la patente de chapa que tendrá cuando se la entreguen". ¡Clarito, como el agua!
Pero, ¡ojo, muchachos! No se hagan los vivos. Esto no es una carta blanca para andar como loco por la calle. Además, la validez de estas patentes se extendió a 180 días por el bardo que hubo con la entrega de las chapas metálicas. Así que en algún momento, te va a tocar tener la patente posta y ahí... ¡a pagar si te mandás una macana!
Por ahora, zafás, pero no te zarpes. Manejá con cuidado, respetá las normas y no te confíes en la suerte. ¡Que la calle no es una pista de carreras!