¡Mate y quilombo! Sancionaron a cana por hacer la "V" peronista y el Intendente salió al cruce ¡Se pudrió todo en La Pampa!
Un policía pampeano hizo la "V" peronista en una juntada y lo sancionaron. El Intendente Di Nápoli salió con los tapones de punta ¡Acá te contamos el bardo interno del PJ pampeano!
¡Agarrate, que arrancamos con un nuevo capítulo de la novela peronista, esta vez desde La Pampa! Resulta que un efectivo de la policía de 25 de Mayo se mandó una macana (según algunos) y ahora hay lío grande.
¿Qué pasó? El compañero policía, en una juntada con el intendente de Santa Rosa, Luciano Di Nápoli (que no se lleva muy bien con el gobernador Sergio Ziliotto), se sacó una foto haciendo la clásica "V" de la victoria peronista. ¡Hasta ahí todo bien, dirán algunos! Pero la foto se viralizó y al poli le cayó una sanción por "falta al Régimen Disciplinario Policial". ¡Diez días de arresto por un gesto! ¡Tremendo!
Pero acá no termina la cosa. El intendente Di Nápoli, ni lerdo ni perezoso, salió a bancar al policía y denunció "persecución política" en la provincia. ¡Se puso las pilas y no se guardó nada! Según él, esto es una movida para castigar a los que piensan diferente dentro del peronismo pampeano. ¡Tremendo quilombo interno!
Di Nápoli le mandó un mensaje directo al gobernador Ziliotto, pidiéndole que intervenga y deje sin efecto la sanción. "Queremos un peronismo que abrace la diversidad, no que la castigue", disparó el Intendente. ¡Picante!
¿Y por qué tanto lío por una foto? Bueno, resulta que en La Pampa el peronismo está más dividido que la quiniela. Ziliotto y Di Nápoli están enfrentados por la conducción del partido, y esto de la sanción al policía parece ser una muestra más de esa interna. ¡Cada uno atrincherado en su postura!
La cosa viene de antes, cuando Di Nápoli se separó de La Cámpora y quiso tener más poder en el partido. El gobernador, Ziliotto, no le dio el gusto y ahí se pudrió todo. ¡Como en las mejores familias peronistas!
Así que ya saben, amigos. En La Pampa, un simple mate y una "V" peronista pueden desatar una interna feroz. ¡La política, señores, es un plato que se sirve frío (y con mucho mate)! Ahora, a esperar cómo sigue este culebrón. ¡Que la sigan chupando!
