El dolor de familiares y colegas en el velatorio de Mario Mactas en la Legislatura porteña
El mundo del periodismo argentino llora la pérdida de Mario Mactas, un grande de la pluma y la radio. Repasamos su trayectoria y el último adiós de colegas y amigos.

¡Che, qué noticia triste para arrancar la semana! Se nos fue Mario Mactas, un periodista con todas las letras, de esos que ya no quedan. El tipo, a sus 80 años, la venía peleando con una neumonía y lamentablemente el sábado 12 de julio nos dejó. ¡Una pena enorme!
Desde temprano, este domingo, el Salón Perón de la Legislatura de la Ciudad de Buenos Aires se llenó de amigos, familiares y colegas para darle el último adiós a este grande. Imaginate, entre los que se acercaron a despedirlo estaban Mariana Mactas (su hija, que también labura en TN), Chiche Gelblung, Ariel Tarico, Alejandro Dolina y Lorena Maciel. ¡Un verdadero desfile de figuras!
La noticia la dio Gustavo Tubio en TN, con la voz quebrada. "Es una pena muy grande para el periodismo en general y para esta casa, en particular. Ha muerto el querido Mario Mactas", dijo el periodista, visiblemente emocionado. Y no es para menos, eh. Mactas era un tipo que le ponía pasión a lo que hacía, hasta en los momentos más jodidos.
Guillermo Lobo, otro compañero de TN, también lo recordó con cariño: "Compartíamos en De 10 a 13 un momento exquisito, que era ‘El Toque Mactas’. En más de una oportunidad estaba achacado, pero venía igual porque era su vida. Su pasión". ¡Un laburante de ley!
Mactas, nacido en el "44, era un tipo que le escapaba a lo previsible. Después de estudiar Medicina y Filosofía, se mandó de cabeza al periodismo, porque para él era "una rama del arte". Y vaya que lo demostró en sus laburos en Radio Continental, TN, Infobae y La Nación. Además, escribió libros como "Monólogos rabiosos" y "El enano argentino". ¡Un verdadero crack!
Su hija, Mariana, le hizo un documental llamado "Un tal Mario" que se estrenó el año pasado y se proyectó en el BAFICI este año. La peli recorre su vida, incluyendo su paso por la revista Satiricón, que lo obligó a exiliarse durante la dictadura. ¡Un tipo que no se callaba nada!
Con la partida de Mario Mactas, el periodismo argentino pierde a un grande. Un tipo que supo combinar la ironía, la cultura y la crítica con una pluma filosa y una mirada aguda de la realidad. ¡Se lo va a extrañar, viejo!