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Espectáculos triste

Murió René Bertrand: se fue un grande del teatro y la tele argentina

El actor y director René Bertrand falleció a los 53 años en Buenos Aires. Una historia de amor y teatro junto a Belén Giménez cerró su ciclo de manera inesperada.

Este jueves el mundo del espectáculo se quedó sin una de sus figuras más queridas: René Bertrand, actor y director con una basta trayectoria en teatro y televisión, murió a los 53 años en un sanatorio de la Ciudad de Buenos Aires. La noticia se sintió como un baldazo de agua fría, confirmada por sus amigos Gustavo Sofovich y Mariano Iúdica, quienes están todavía en shock por esta pérdida que pegó fuerte en el ambiente artístico.

Desde aquel verano del 2009 en la Costa Atlántica, cuando René y Belén Giménez se cruzaron en una obra, el amor se les prendió fuego y nunca más se apagó. Juntos compartieron más de diez obras y formaron una familia con sus hijos Sofía y Franco, llevando el teatro y la vida cotidiana pegaditos como si fueran uno solo. En 2016 sellaron su amor con casamiento por iglesia el 20 de mayo, fecha que Belén celebra todos los años con fotos y palabras llenas de ternura.

René no se guardaba nada y, en el último Día de la Madre, le dedicó a Belén un mensaje que era puro corazón, con palabras que muestran lo que fue ese amor hasta el final: compañera, amiga y mamá de sus pibes. El verano pasado siguieron metiéndola en Villa Carlos Paz con P.O.C.O y planeaban un estreno más para seguir alimentando ese fuego creativo.

El actor luchaba contra una enfermedad ósea que en las últimas horas le jugó en contra y le provocó un colapso inesperado que terminó con su vida. Iúdica estaba camino al sanatorio para despedir a su compinche y bancar a la familia en este momento durísimo. La tristeza en la escena porteña es enorme, pero queda intacto el legado de un tipo que se puso la camiseta del teatro y la vida con toda la pasión y entrega.

Así fue la historia de un amor que nació sobre las tablas y se convirtió en familia, en sueños compartidos y en un fuego que, aunque se apagó en este mundo, seguro sigue iluminando su camino desde donde esté. Un abrazo fuerte y profundo a los suyos en esta hora de dolor y recuerdo.

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