Milo J, el pibe que la rompe, confesó cómo fue su primer show: ¡cantó por una hamburguesa!
El joven del Oeste, que llena estadios, recordó sus humildes comienzos. ¿Sabías que su primer "recital" fue en la calle y la paga era una simple hamburguesa? ¡Una historia que te va a sorprender!
Milo J, el pibe que hoy llena estadios y acaba de sacar su disco "La vida era más corta", está contando los días para su gran debut en Vélez. Después de romperla en Morón y hacer varias fechas en el Movistar Arena, este pibe del Oeste se prepara para el show más grande de su carrera. Pero en medio de tanto éxito, el joven sorprendió a todos al recordar cómo fueron sus verdaderos inicios.
En una charla mano a mano con Mario Pergolini, Milo J abrió el baúl de los recuerdos. Mientras veían imágenes de aquel primer "recital" en la calle, justo afuera de un local de comidas rápidas, Pergolini le preguntó si había pedido permiso o si fue un "show robado".
Y ahí vino la sorpresa. Milo, con una sonrisa, soltó la posta: "En realidad fui porque me prometieron una hamburguesa". Imaginate la alegría del pibe: "Tengo que cantar tres temas y me dan una hamburguesa gratis. ¿Sabés qué? Poneme el parlante que quieras, el micrófono que quieras, yo me mando", contó entre risas, mostrando la garra desde el principio.
En el video se lo veía cantando con una camiseta de los Boston Celtics, pero sin ni un fan alrededor. "El público ese día era mi hermana y Marcos, que le mando un abrazo grande. Fue mi primer amigo productor. Me comí una re hamburguesa después", recordó. Pergolini, un poco incrédulo, dijo: "No hay nadie". Pero Milo, con la familia siempre bancándolo, afirmó: "Ahí está mi hermana filmando, creo". Y cuando Mario dudó si fue un fracaso o un comienzo, Milo fue claro: "Y yo me comí una hamburguesa, así que fue un gran éxito, creo yo". ¡Un golazo!
Qué distinto es el presente. Hace unos meses, Milo J metió un Movistar Arena con entradas agotadas. Más de quince mil personas vibraron con el pibe, que desplegó un show tremendo con visuales impresionantes, un repertorio renovado y un montón de invitados de lujo, incluyendo a Nicki Nicole.
La noche arrancó con proyecciones que lo mostraban yendo del backstage al centro del escenario, rodeado de tipos de traje. El músico, que tiene solo dieciocho años, abrió con "3 PECADOS DESPUÉS" en un escenario lleno de luces violetas, haciendo que la gente saltara desde el primer minuto.
Después sonaron temas como "Ni Carlos ni José" y "Retirada", con una banda en vivo que metía trompetas y vientos, mezclando lo urbano con un toque de folclore. Uno de los momentos más zarpados fue cuando cantó "No soy Eterno", su tema con Bizarrap, esta vez él solo. La gente no paraba de corear: "Olé, olé, olé, Milo, Milo".
De cantar por una hamburguesa en la calle a llenar estadios y que miles coreen tu nombre. La verdad, la historia de Milo J nos hace pensar que, a veces, las grandes carreras arrancan por las cosas más simples. ¡Quién te dice que el pibe no se ponga las pilas y termine cantando en la Luna!
