Villa Allende: Trasladaron el histórico quebracho en medio de polémica y protestas
Después de días de tensión, el emblemático quebracho blanco de Villa Allende fue reubicado. Incidentes, protestas vecinales y una grúa rebelde marcaron el operativo. ¿Tendrá final feliz esta historia?

¡Se armó flor de quilombo en Villa Allende! Después de días de tensión, el famoso quebracho blanco que estaba en el medio de la obra de ampliación de la avenida Padre Luchesse, finalmente fue trasladado.
El sábado, la cosa se puso picante: la grúa que trajeron desde Tucumán para mover el árbol se rompió, dejando a todos con la boca abierta. Mientras tanto, los vecinos que no querían que lo tocaran armaron un acampe y hubo encontronazos con la policía. ¡Un verdadero lío!
Pero el domingo, después de arreglar la máquina, lograron sacar el árbol y lo pusieron en un pozo nuevo, a unos 50 metros de donde estaba. Le pusieron una malla y cámaras de seguridad para protegerlo. Según las autoridades, hicieron todo con cuidado, protegiendo las raíces.
Igual, la colectora sur de la avenida Luchesse sigue cerrada mientras preparan el terreno. Esta obra, impulsada por Caminos de las Sierras, busca mejorar el tráfico entre Villa Allende y Córdoba, para que pasen unos 25 mil vehículos por día.
Los vecinos que se oponen al traslado siguen firmes con el acampe y planean cómo seguir la lucha. Dicen que un fotógrafo y un manifestante fueron agredidos durante los incidentes del sábado.
Santiago Carmona, el director de Ambiente de Villa Allende, salió a defender la decisión. Explicó que la raíz principal del quebracho no era tan profunda como se pensaba y que trasplantarlo era posible, aunque arriesgado. "Todo trasplante de un árbol adulto conlleva riesgos, eso es indiscutible, pero no se puede confundir riesgo con certeza de fracaso", aseguró.
Además, dijo que el árbol ya estaba medio baqueteado antes del traslado, con ramas secas y raíces compactadas. Para Carmona, dejarlo donde estaba era peor.
Desde el municipio también informaron que se tomaron todas las precauciones para proteger las raíces durante la remoción. Y para compensar, entregaron mil plantas nativas para reforestar la zona. ¡Hasta el INTA mandó material genético del quebracho para que lo puedan reproducir!
Ahora, la obra sigue adelante con vigilancia policial, mientras los manifestantes mantienen el reclamo. Queda preguntarse si este trasplante será un golazo o el principio del fin para el pobre quebracho. El tiempo dirá…