El plan oficial para sacar dólares del colchón no despega y los inversores esperan las elecciones
Las medidas del Gobierno para captar dólares que están guardados en la casa no lograron aumentar las reservas. Los dólares que salieron fueron para turismo y los inversores apuestan a las tasas y a las elecciones.

El Gobierno desembarca con un plan para que la gente saque los dólares del colchón y así reforzar las reservas, pero la estrategia no terminó de prender: los verdes que afloraron sirvieron para financiar viajes al exterior y no ingresaron al sistema. Mientras tanto, los depósitos en dólares de privados crecieron USD 127 millones en junio, mostrando una estabilidad sin sobresaltos.
Para contener la presión sobre el dólar en este año electoral, el equipo económico mantiene tasas altas, que aunque cedieron un poco, podrían seguir vigentes después de las elecciones. El dólar intenta encima superar el promedio de $1.200, lejos del objetivo de $1.000 para que el Banco Central intervenga y compre reservas.
Los inversores prefieren esperar el desenlace político antes que mover mucho las fichas, apostando a la tasa de interés como la herramienta clave para frenar precios y consumo. Expertos como Federico Furiase y Nau Bernues coinciden en que el escenario es raro pero real, con un superávit fiscal y balanza comercial positiva, pero un fuerte déficit en la cuenta corriente por la masiva salida de turistas al exterior.
Se abre un juego delicado donde el sector privado financia un déficit externo creciente comprando en dólares y viajando, mientras el Estado sigue sin emitir ni endeudarse. La pregunta es qué tan sostenible será esta dinámica sin que la economía se clave un buen quilombo. Además, vuelven las retenciones para soja y maíz, lo que puede afectar la liquidación de dólares agrícolas justo cuando el mercado aguarda señales post elecciones.
Mientras tanto, en Wall Street las Bolsas suben y los inversores se animan más, pero en Argentina el tablero sigue siendo otro, donde la política manda más que la economía y el juego cambia cada rato.