Milei habló de su relación con Trump y del escándalo de $Libra
En una reciente entrevista con The Washington Post, el presidente desmintió su supuesta participación en el escándalo financiero LIBRA y defendió su relación con figuras como Trump y Musk.

La última aparición de Javier Milei en una entrevista con The Washington Post dio mucho de qué hablar. El jefe de Estado clown eslógan, pateó el tablero al negar cualquier vinculación con el polémico escándalo LIBRA, un tema que ha agitado las aguas políticas en los últimos días.
Milei se defendió con garra y fue contundente: "No soy parte de la estafa", subrayó, dejando a más de uno con la boca abierta. Además, el mandatario se despachó sobre su relación con el ex presidente estadounidense Donald Trump, asegurando que "es un grandísimo amigo" y que su conocimiento sobre la situación económica argentina lo hace aún más cercano. Al parecer, la amistad va más allá de las redes sociales.
En el marco de la controversia, el propio Washington Post caracterizó el escándalo LIBRA como un "manejo muy oscuro de dinero" que involucra a funcionarios de alto rango. Por supuesto, none de esto parece preocuparse a Milei, quien continúa en su cruzada por una administración sin "vínculos corruptos" y promete una reorganización del sistema financiero. "No puedo seguir viviendo como vivía antes de ser presidente", se quejó entre risas, como si hubiese sido un simple cambio de temporada de vestuario.
Además de las risas, Milei no dejó de lado la represión del Gobierno. "Defiendo la dura postura", comentó, dejando a los críticos mirando para otro lado, como quien no quiere la cosa. Con estrechas conexiones a personalidades como Elon Musk, el presidente argentino parece haber encarnado una rareza política que da para otro interesante capítulo en el drama de la política contemporánea de la región.
Mientras tanto, la oposición observa con atención, esperando algún traspié que pueda hacer tambalear la ya media cuna del presidente, pero por ahora, Milei se encuentra firme en su posición. Y recordemos, en la política nada es lo que parece… ¡Así que a agudizar las antenas, amigos!